Roberto Santos // Mario Moreno Arcos no se esconde. No titubea. Con la serenidad que dan los años de oficio político, responde con una frase que, por sí sola, marca agenda: “Me veo en una boleta”. No necesariamente en Morena, aclara. Pero tampoco cierra la puerta.
En política, sabemos que dejar una rendija abierta puede ser suficiente para que entre la posibilidad completa.
La afirmación la hace en entrevista con Julio Zenón, periodista acapulqueño y director de Enfoque Informativo, y lejos de sonar como un acto de vanidad, la respuesta se sostiene en los hechos.
Moreno Arcos es, hoy por hoy, un político de tiempo completo, de esos que no esperan el calendario electoral para aparecer, sino que recorren el territorio cuando algunos se echan a la hamaca.
En los próximos días estará en Copanatoyac, en la Montaña, apadrinando una corrida de toros; luego en Marquelia, Costa Chica, y de regreso en Acapulco, donde mantiene encuentros con organizaciones sociales.
Lo suyo no es turismo político, es presencia en territorio donde recibe respaldos.
A Mario lo buscan para escucharlo, pero también para decirle que, llegado el momento, lo apoyarían si decide volver a intentar la gubernatura.
El también expresidente municipal de Chilpancingo se asume hoy más cerca de la sociedad civil que de las estructuras partidistas, aunque no es ajeno a ellas.
Reconoce que Alfonso Ramírez Cuéllar lo ha convocado a reuniones con estructuras de Morena pensando ya en el 2027. El dato no es menor. No se invita a cualquiera a esas mesas. Se llama a quienes todavía pesan, a quienes tienen capital político real.
Y aun con todo, Moreno Arcos es cuidadoso en el discurso. A Julio Zenón le dice que apoyará a quien decida nominar esa estructura que encabeza el diputado Ramirez Cuéllar. Una declaración que suena a prudencia.
En un tablero político donde los nombres ya circulan —Félix Salgado Macedonio, quien ya dijo que será el candidato; Beatriz Mojica, quien sube en las encuestas; Estela Damián, quien avanza en alianzas; y Abelina López, entre otros— mantenerse vigente sin confrontarse es una forma inteligente de competir.
No hay que olvidar su pasado inmediato: fue candidato al Senado por Movimiento Ciudadano y logró colocar al partido en segundo lugar en votos, una hazaña que pocos consiguieron.
Hoy se mantiene distante de MC, pero no aislado. Él mismo reconoce su buena relación con Héctor Astudillo Flores, coordinador nacional de Enlace Político del partido naranja.
Si bien, Mario Moreno no anda en campaña, tampoco está en retiro. Recorre Guerrero, escucha, se deja querer. Se mueve esperando el momento preciso, mientras se mantiene en la conversación.
Y cuando un político como Mario dice que se ve en la boleta, normalmente no es un deseo, es una clara advertencia de que hará valer su fuerza electoral para conseguirlo.