Regidores acusan a Norma Otilia Hernández de corrupción, desvío de recursos federales y realizar obras de mala calidad

* En sesión pública de cabildo, ediles denunciaron que el año pasado la obra pública la asignó el esposo de la alcaldesa, sin licitar, a 3 constructoras
* En este año la obra pública sólo será para 93 de 592 colonias que hay en Chilpancingo

Marcial Campuzano // En una acalorada sesión pública de cabildo efectuada en el zócalo, la presidenta municipal de Chilpancingo Norma Otilia Hernández Martínez fue directamente acusada por regidores del PRI, del PRD y por el morenista Iván Galíndez, de haber incurrido en graves irregularidades en la asignación de la obra pública el año pasado; de que es su esposo quien asigna la obra pública en el municipio; y de haber dispuesto el año pasado de dinero público federal para fines no autorizados.

También fue acusada de haber beneficiado con obra pública prevista para este año, a sólo 93 de 592 colonias populares que hay en la ciudad con una inversión de 347 millones de pesos, con una pésima planeación en la ejecución de las mismas que no precisa los sitios donde se invertirán varios millones de pesos, ni establece metas ni tiempos de conclusión de las obras que sean asignadas a empresas constructoras.

En este ejercicio de cara a los chilpancingueños al que la alcaldesa sólo permitió el acceso a seguidores y simpatizantes afines, y excluyó del zócalo a quienes exigen ser contemplados con obra pública en este año, la regidora priísta Reynaldo Pablo de la Cruz votó en contra del programa de obras municipales 2023, porque el proyecto que presentó la alcaldesa engloba las acciones de manera general, es decir sin detallar las acciones de gobierno, “por lo que no podemos entregar una confianza a ciegas porque estamos hablando de varios millones de pesos”.

Señaló que en Chilpancingo no hay la transformación que pregona la presidenta municipal, “vemos la misma opacidad, la misma corrupción, tenemos presentada una auditoría para el ayuntamiento porque hay unos cuantos millones de pesos que no cuadran”.

Denunció ante un público afín a Norma Otilia, que el cabildo morenista de Chilpancingo rehúye hablar de temas económicos, y que por ese motivo fue modificada el orden del día porque se iban a ventilar modificaciones irregulares hechas al presupuesto del año pasado, “no quieren que se transparenten los recursos que están perdidos, pero a través de una auditoría van a aparecer”, indicó.

La regidora priísta Guadalupe Aguilar Alcocer, aprovechó el momento para denunciar públicamente que la alcaldesa Norma Otilia Hernández aplica la ley mordaza a miembros del cabildo, quitándole la voz a quienes no comparten sus actuaciones, “violentando mi derecho a la libertad de expresión, por esa intolerancia he abandonado varias veces la mesa de sesión”.

Hizo público que votó en contra del programa de obras de este año, porque de las 93 colonias beneficiadas hay varias que tienen asignadas hasta 6 obras, otras no tienen una sola acción del gobierno municipal. Preguntó al cabildo si hay justicia social en la programación de la obra pública, o ésta responde a muy grandes compromisos políticos.

Desmintió públicamente las afirmaciones que hizo Norma Otilia en el sentido de que los regidores opositores a Morena pidieron canonjías, por lo que le pidió en la audiencia pública que demuestre que le hizo esa petición, o que hizo negociaciones por debajo de la mesa.

“Si no lo demuestra le exijo una disculpa pública porque no es posible que ensucie el trabajo que realizo con todas las limitaciones y bloqueos” en el ayuntamiento, indicó.

Guadalupe Aguilar hizo público que en el ayuntamiento de Chilpancingo el que asigna la obra pública es el esposo de la presidenta municipal. De inmediato fue interrumpida por síndico Andrei Marmolejo, a quien la edil acusó de ser quien en las sesiones de cabildo siempre le arrebata la palabra cuando denuncia las cosas malas que se hacen en el gobierno municipal de Chilpancingo.

Denunció que el año pasado se presupuestaron recursos económicos para la compra de 13 patrullas, y que sólo fueron compradas 3, y que una de éstas fue facturada a una empresa constructora, “eso que lo juzgue el pueblo”.

La regidora priísta Inés Camarillo Balcázar exigió que la obra pública programada para este año, sea sometido a concursos de licitación pública y abierta, para que los empresarios de la construcción tengan las mismas oportunidades de participar en el concurso.

Denunció que el año pasado la obra pública municipal fue asignada de manera directa y por invitación a sólo 3 contratistas.

Denunció que en el programa de obras 2023, no hay acciones para fortalecer el sistema de salud municipal, salvo para una casa de salud en Santa Rita. Dijo que espera que los 8 millones de pesos programados para el bacheo de calles alcance para toda la ciudad.

Denunció también que de manera inexplicable la presidenta municipal contrató a una empresa para que se haga cargo del alumbrado público, “cuando tenemos la Secretaría de Servicios Públicos que fue creada para ello”.

Denunció también que la Secretaría de Obras Públicas se apartó un presupuesto de más de 10 millones de pesos “como caja chica”, que bien servirían para realizar 10 0bras de 1 millón de pesos cada una en colonias o comunidades del municipio.

Hizo público que en este año la alcaldesa aumentó “de manera bárbara” los impuestos en el municipio de Chilpancingo.

La regidora Inés Camarillo hizo un llamado a los chilpancingueños que vigilen que la obra pública para que sea de calidad, “y que no a mitad de la obra las dejen abandonadas como ha sucedido, o que la hagan 2 o 3 veces como ocurrió en la calle 5 de Mayo donde nadie podía hacer nada porque no se sabía quién era el ejecutor de la obra”.

Dijo que el único cambio o renacimiento que se ha visto en el municipio, “es la transformación de algunos funcionarios y funcionarias que hoy estamos aquí”.

El regidor Antonio Guzmán denunció que mañosamente la mayoría morenista del cabildo de Chilpancingo, sacó del orden del día un punto que daba cuenta de la modificación del presupuesto del año pasado, “porque el dinero no se gastó y no se aplicó como se proyectó en el Plan Operativo Anual, el dinero se ocupó en otra cosa y hoy se iba a someter a discusión, pero el punto fue sacado porque no quisieron que se llevara a debate frente de ustedes” en alusión al auditorio.

El regidor dijo que en el 2022 se aplicaron 1,000 millones de pesos en obra a medias. “Mañosamente fueron retirados esos puntos del orden del día para que ustedes no se dieran cuenta de la realidad que vivimos en Chilpancingo en cuanto hace a la ejecución de obras”.

La regidora por el PRD Ángeles Vázquez Pastor, se sumó al llamado que hicieron sus homólogos para que la gente sea fiel vigilante de la obra pública que realice el ayuntamiento. Advirtió que no encubrirá ni tapará anomalías que ocurran en la realización de la obra pública prevista para este año.

Lamentó que muchas colonias de la ciudad se hayan quedado sin obra pública en este año, y denunció que también ha sido víctima de la ley mordaza que aplica la presidenta municipal con el apoyo de los ediles morenistas, cuando se le critica y se cuestionan las cosas malas que se hacen.