Zona Cero || Movimiento Ciudadano en Guerrero, como el Titanic

Roberto Santos // ¿Ya supieron que está pasando con Movimiento Ciudadano en Guerrero?
No, bueno… si el partido naranja fuera una fiesta, ya estarían pensando en apagar la música y recoger los vasos.

Sucede que mientras en otros estados los dirigentes de MC andan presumiendo que crecen, que suman liderazgos, que si el futuro, que si lo nuevo… en Guerrero el show es otro.

Y no precisamente un stand-up exitoso. Aquí parece más una tragicomedia política con guion escrito por alguien que no ha leído ni un manual de convivencia.

Todo estalla con la salida de Lázaro Mazón Alonso —sí, ese que fue secretario de Salud, excandidato a la alcaldía de Iguala y que todavía tiene su buena base de apoyo en su municipio.

Pues resulta que al buen Lázaro simplemente no lo invitaron a un evento de su partido… ¡en su propio municipio! Así como lo oyes: lo dejaron vestido y sin conferencia.

“Yo me enteré por los medios”, dijo el hombre. ¡Por los medios! O sea, ni por el WhatsApp de la estructura le llegó el flyer.

Si eso no es descortesía política, quién sabe qué es.

Pero ojo, que esto no fue un caso aislado, eh. A eso súmale que los dos únicos regidores de MC en el Cabildo de Iguala también dijeron: “¿saben qué? mejor ahí muere”, y se declararon independientes.

¿La razón? La misma: que si la cúpula del partido no escucha, que si los hacen a un lado, que si nomás los usan para la foto y luego ni las gracias…etc.

Y aquí es donde la anécdota se vuelve análisis: lo que está pasando en MC Guerrero no es solo una pelea de egos. Es una desconexión total entre quienes toman las decisiones y quienes realmente jalan gente en las calles.

Porque, seamos honestos, ¿qué tan difícil es invitar a alguien como Mazón a un evento? O sea, si ya les dio más de 10 mil votos, mínimo se merece una llamada, ¿no? ¿O a poco el ego es tan grande que ya se les olvidó que la política se trata de sumar?

Habrá que recordar que también sacaron de la jugada a Mario Moreno Arcos después de la elección a la senaduría. Sí, otro nombre con peso, ese que les dio votos y espacios de representación, que salió diciendo “ahí se ven” porque no le agradecieron ni lo pelaban y hasta maltrataron sin causa ni beneficio alguno.

Cuando dos (o más) líderes con trayectoria dicen lo mismo, ya no es chisme: es un patrón de conducta de la dirigencia.

Entonces, mientras MC en otros lados arma estructuras y recluta nuevos cuadros, en Guerrero parece que están jugando a “sálvese quien pueda”.

Y con las elecciones de 2027 acercándose, esto pinta más para naufragio que para remontada.

Porque si la competencia política es una jungla y la lealtad cambia más rápido que de estación el radio, no pueden darse el lujo de cerrar la puerta a los suyos.

Parece que ya se les olvidó la promesa de ser un “partido ciudadano” y éste se les puede ir como agua entre los dedos.

Está claro que están perdiendo no solo militantes… están perdiendo la confianza ciudadana.

Y en política, el capital más difícil de recuperar es la confianza, y MC la empieza a perder en Lázaro Masón y en sus regidores.