La Sexta Sala del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México rechazó la apelación de Víctor Garcés y determinó que no puede ostentarse el título de vicepresidente deportivo, debido a que no presentó pruebas suficientes que lo acreditaran como tal.
Garcés reapareció en la Noria después de años de ausencia y lo hizo presentándose como vicepresidente deportivo ante la sorpresa de aficionados y propios jugadores. Por si fuera poco, su llegada fue determinante para que Ricardo Peláez renunciara a su cargo como director deportivo.
El caos que se generó con la aparición de Garcés terminó hasta los tribunales, pues demandó a Billy Álvarez en el Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México para que rindiera cuentas de los últimos 25 años en su administración Cruz Azul, cuya demanda falló a favor del presidente del equipo.
La resolución indicó que Garcés no tenía facultades como vicepresidente en Cruz Azul por lo que no procedió la demanda, sin embargo, el polémico cuñado de los Álvarez apeló la decisión, que nuevamente fue rechazada.
Delia Rosey, Francisco José Huber Olea y Miguel Ángel Mesa Carrillo declararon “improcedente, insuficiente y contradictoria” su demanda.