Persiste en la Sierra de Guerrero la tala clandestina de árboles

La presencia de grupos delictivos evita frenar la extracción de madera y combatir incendios forestales: Semaren

Marcial Campuzano // La presencia de organizaciones delictivas que tienen radio de acción en las partes serranas del estado, no permitió el año pasado combatir incendios forestales para no poner en riesgo al personal, ni permite tener un control estricto en los aprovechamientos maderables por lo que continúa la tala clandestina de árboles de vocación forestal, reveló el secretario del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semaren) Ángel Almazán Juárez.

En algunos territorios del estado no es fácil penetrar para combatir incendios forestales por la presencia del crimen organizado, “esto tenemos que señalarlo, no es fácil meternos en esos lugares porque nos limitan en ese sentido”, dijo el titular de la Semaren.

Ante esta situación no queda más que trabajar en coordinación con los gobiernos municipales que tienen presencia en las zonas serranas del estado, “para que nos ayuden a abrir brechas para entrar a combatir los incendios en donde no ha sido fácil el acceso”, agregó el funcionario.

Almazán Juárez informó que ya se presentó el primer incendio forestal de la temporada en la región de la Costa Chica, que fue combatido por brigadas contra incendios.

Lo importante no es combatir los incendios sino prevenirlos en coordinación con la Secretaría de Protección Civil, y con la Comisión Nacional Forestal que cuentan con brigadas contra incendios forestales.

Históricamente la mayor cantidad de incendios forestales se registra en las regiones Centro y Acapulco. Si bien la región de la Tierra Caliente no se caracteriza por tener una cantidad importante de siniestros en el campo, los pocos que se han registrado “han sido muy devastadores”. Como ejemplo citó que el municipio de Zirándaro registro el año pasado la mayor cantidad de hectáreas afectadas por las conflagraciones en el campo.

El año pasado ocurrieron en Guerrero 244 incendios forestales que afectaron 108,000 hectáreas de bosques y selvas. La selva es la vegetación tropical y subtropical, y los bosques se ubican en territorios con climas templados y fríos.

Almazán Juárez detalló que la Semaren capacita las brigadas municipales que combaten incendios forestales, porque cuando ocurre una conflagración en el campo los primeros que deben actuar son los gobiernos municipales, después entra en acción el gobierno del estado y la Federación a través de la Comisión Nacional Forestal.

Dio a conocer que el vivero ubicado en la colonia La Cinca de Chilpancingo, reprodujo en este año más de 500,000 plantas con vocación forestal, que fueron donadas a núcleos agrarios, ayuntamientos, organizaciones y escuelas, con las cuales fueron reforestadas más de 300 hectáreas.

Los estudios realizados indican que cerca del 80 por ciento del territorio estatal es forestal con bosques, selvas, matorrales, vegetación secundaria y pastizales, porque de acuerdo a la ley también los pastos son forestales.

En otro tema señaló que la deforestación y la tala ilegal que ocurre en zonas forestales de Guerrero, está propiciando la disminución de agua que es aprovechada para uso doméstico, como ocurre en la zona de Omiltemi que pertenece al municipio de Chilpancingo, en donde bajó considerablemente la captación del vital líquido que aprovechan los habitantes de la capital del estado.

Ante esta situación, funcionarios de la Semaren plantearon al ayuntamiento de Chilpancingo el rescate de la zona de Omiltemi para que siga fluyendo agua. Citó que en la temporada de secas la fuente de captación de Omiltemi no abastece ni 10 litros por segundo.

Informó que hay aprovechamientos forestales avalados por la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) del gobierno federal, y aprovechamientos clandestinos difíciles de combatir por la presencia de grupos delictivos. Aclaró que compete a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente ver todo lo relativo a los aprovechamientos forestales.

“Hemos encontrado que algunos madereros que aprovechan el bosque no fueron aprobados por la Semarnat. Este problema es atendido por la Semaren, por la Comisión Nacional Forestal, por la Semarnat y la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente con la participación de las fuerzas armadas “para que podamos accesar y revisar todo lo que se baja de los bosques no sólo de ésta área sino de toda la Sierra”, indicó.

Anunció que a partir del próximo año habrá operativos para frenar la tala ilegal de árboles en la Sierra de Guerrero, con la participación de la Guardia Nacional y de la Secretaría de la Defensa Nacional, “para detener un tanto la tala ilegal que se lleva a cabo en todo el estado”.

La Semaren cuenta con denuncias presentadas por núcleos agrarios por las talas ilegales de árboles, como ha ocurrido en El Carrizal, en la Sierra Madre del Sur, en la Tierra Caliente que colinda con la Costa Grande que son zonas donde se baja mucha madera que es conducida a Tecpan, Petatlán y Zihuatanejo.

Informó que la Semaren está en vías de reconstruir la Policía Ecológica que mucho ayudará para combatir los delitos ambientales.