El Acapulco olvidado
Recorrer la zona rural de mi querido municipio de Acapulco en los días previos al regreso a clases, visitando algunas comunidades para llevar a través de nuestra asociación civil JACKOmienza, útiles escolares, ropa y otro tipo de apoyos, me ha permitido reencontrarme con mucha gente que aprecio.
He tenido también la oportunidad de saludar a gente noble del campo que me ha expresado su afecto e incluso acompañado en nuestro proyecto de servir a nuestro pueblo desde la presidencia municipal, un sueño que con el favor de Dios habremos de alcanzar en el 2021.
Pero también he podido constatar, allá en el lugar de los hechos, en los pueblos más apartados, la miseria y el abandono en que se encuentran, sin servicios públicos, sin apoyos, pero lo más triste, sin oportunidades de desarrollo que les ayuden a mejorar sus condiciones de vida. Olvidados por completo del gobierno que está obligado, por ley, a proveerles.
Sin exagerar, aún en Acapulco, el municipio más importante de Guerrero, que se precia de tener la bahía más hermosa del mundo y un destino turístico de talla internacional, existen comunidades donde las familias no tienen qué comer, los niños andan descalzos y a medio vestir, ya no digamos que vayan a la escuela, un lujo difícil de alcanzar para ellos.
Justamente eso es lo que nos duele. La miseria y el abandono en el que viven nuestros paisanos, nos lastima y nos mueve a seguir luchando para que mejoren sus condiciones de vida. Estamos convencidos de que Acapulco es grande, es fuerte y juntos vamos a salir adelante. Sin duda alguna, Acapulco lo va a lograr¡
Mientras tanto… ¡Jálalo que es pargo!