La ahora Fiscalía General de la República (FGR) impugnó su liberación y buscó que un juez federal ordenara nuevamente su aprehensión, sin embargo, pretendió sustentar esta petición con base en la misma carpeta de investigación donde se integraron los indicios de prueba obtenidos mediante tortura.
Debido a ello, el juez negó la orden y la FGR solicitó la revisión del caso ante el colegiado, quien ratificó la suspensión a favor de López Estudillo.
La decisión judicial impide detener al presunto líder de “Guerreros Unidos” en tanto la FGR no rectifique su carpeta de investigación, elimine todos los datos de prueba obtenidos mediante tortura, y sólo cuando esto ocurra, un juez podría emitir una nueva orden de aprehensión debidamente fundamentada.
El fallo del colegiado avala “conceder la suspensión definitiva al quejoso para el efecto de que las cosas se mantuvieran en el estado que guardaban, esto, para que se detuviera la ejecución de la determinación pronunciada por el Magistrado responsable, sin afectarse la libertad personal del quejoso”.