La secretaria de Bienestar, Adriana Montiel Reyes, encabezó la segunda reunión de trabajo hacia una Pensión Universal para las Personas con Discapacidad con el objetivo de que se amplíe y llegue a más beneficiarios.
De acuerdo con un comunicado publicado por la secretaría, la finalidad es que el gobierno federal aporte 50 por ciento y los gobiernos estatales el otro 50 por ciento del presupuesto que se requiere para que todas las personas con discapacidad permanente puedan acceder a la pensión, sin distinción alguna.
La secretaria del Bienestar subrayó la importancia de trabajar en conjunto para la toma de decisiones coordinadas en las tareas que se requieren para el registro de quienes serán los nuevos derechohabientes de la pensión, las aportaciones que cada estado hará para que la pensión se amplíe en su entidad, entre otras acciones.
En tanto, la subsecretaria de Bienestar, María del Rocío García Pérez, dijo que el gobierno de la República ha puesto especial énfasis en impulsar un cambio social a través de la implementación de acciones que promuevan, reconozcan y garanticen el ejercicio de los derechos de las personas con discapacidad.
“En la Secretaría de Bienestar, agregó, tenemos claro que transitar de un modelo asistencialista, como el que perduró por muchos años, a uno de garantía de derechos, requiere de decisiones concertadas, trabajo conjunto y coordinado que den como resultado acciones eficaces a favor de quienes más lo necesitan”, dijo.
Actualmente, la pensión la reciben sólo niñas, niños y jóvenes de cero a 29 años, así como adultos de 30 y hasta antes de cumplir 64 años que habitan en comunidades indígenas y afromexicanas.
En el evento estuvieron presentes también el titular de la Unidad de Planeación y Evaluación de Programas para el Desarrollo, Rodrigo Abdala Dartigues, así como el titular de la Unidad de Política Interior de la Secretaría de Gobernación, Nicolás Bellizia Aboaf.