Marcial Campuzano // El ayuntamiento de Chilpancingo incrementará el próximo año el impuesto predial, las licencias de funcionamiento de diversos giros comerciales, y otras contribuciones que representarán un duro golpe a la economía popular de una población severamente golpeada por la pandemia del virus covid-19.
La regidora priísta Inés Camarillo Balcázar, informó que los aumentos en las contribuciones están plasmados en la Ley de Ingresos del municipio que elaboró el gobierno municipal para el ejercicio fiscal 2023, que en su momento será analizada y en su caso aprobada por el pleno del Congreso del estado.
El golpe económico sobre todo a los grupos más vulnerables de la población, generará problemas en la capital del estado, “porque la gente está cansada de pagar impuestos excesivos en una ciudad en la que no hay generación de empleos, y predomina una canasta básica de alimentos cada vez más cara por los aumentos que tienen los productos de primera necesidad que la integran”.
Recordó que el año pasado también registraron aumentos excesivos las licencias de funcionamiento de diversos giros comerciales, que provocó muchas inconformidades entre los dueños de diversos establecimientos comerciales.
En muchos casos los incrementos en las licencias de funcionamiento fueron de más del 100 por ciento, como recientemente lo informó el presidente del Consejo Coordinador Empresarial Omar Elías Azar.
Por los daños a la economía que ocasionó la pandemia del virus covid-19, en Chilpancingo ni en otra parte del estado se justifica que aumenten los impuestos, porque el virus generó mucho desempleo y desactivó la economía, indicó la regidora.
Aclaró que los aumentos en los impuestos contenidos en la Ley de Ingresos para el ejercicio fiscal 2023, fueron aprobados por mayoría de votos por la alcaldesa, la síndica, el síndico y los regidores del Partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), con la oposición de ediles de otras expresiones políticas.
En otro tema la regidora priísta denunció que la presidenta municipal Norma Otilia Hernández Martínez, se agandalló toda la obra pública programada para este ejercicio fiscal, sin tomar en cuenta propuestas de obra pública que presentaron regidores de otras expresiones políticas.
En el proceso de campaña, los regidores priístas elaboraron una agenda política que recogió las demandas de la población en obra pública, que más tarde se convirtió en agenda de gobierno que fue presentada en el cabildo, pero fue desechada por Norma Otilia y ediles afines.
Inés Camarillo informó que la agenda de obra pública del municipio, fue integrada por los “delegados” municipales habilitados por la presidenta municipal, a quienes en una reunión que contó con la presencia del secretario de Obras Públicas Carlos Leyva, la propia Norma Otilia les hizo un reconocimiento bajo el argumento de que gracias a ellos hubo en este año un programa de obra pública en el municipio.
La regidora priísta informó que con motivo de su primer año de gestión, los ediles del PRI presentarán un informe de las actividades realizadas con recursos propios, ante la falta de apoyos de la alcaldesa para atender la demanda social.