Por Efraín Flores Iglesias // El pasado miércoles y a invitación de mi amigo y colega José Luis González Cuevas, director general de la plataforma digital “¿No que no? Comunicación Estratégica”, participé en la Mesa de Análisis “Kakistocracia y perspectivas 2023”.
Cuando “El Chocorrol” −así es conocido popularmente el director del ¿No que no?− me comentó sobre el tema que se abordaría en el programa, solté una carcajada, ya que el término “kakistocracia” es, sin lugar a dudas, polémico.
De manera puntual llegué al restaurante “El Señorial”, en donde ya se encontraba Christian Cuchillo listo para trasmitir el programa, en el que también se darían cita el colega Noé Mondragón Norato, catedrático, escritor y autor de la columna “Lectura Política”, y José Guadalupe Prieto Caracheo, experto en comunicación política y ex jefe de prensa de varios actores políticos.
Antes de iniciar el programa, “El Chocorrol” instruyó a Cuchillo hacer una prueba del sonido para escuchar si los micrófonos estaban bien.
A las 18:00 horas inició la transmisión en vivo de la Mesa de Análisis, y en su calidad de moderador, José Luis González aclaró que el tema del programa nada tenía que ver con el personaje motejado como “El Cacas” y que ha sido objeto de escarnio en las redes sociales.
Los panelistas dimos nuestros puntos de vista y coincidimos en algunos escenarios políticos de carácter estatal y nacional. Lo cual es válido y respetable, porque cada quien percibe lo que ocurre a su alrededor de manera diferente.
Durante mi primera intervención, me centré en el significado del término “kakistocracia”, manifestando que proviene del griego κάκιστος (kàkistos), el peor y κράτος (kratos), gobierno, y es un término utilizado en análisis y crítica política para designar un gobierno formado por los más ineptos de un determinado grupo social. O sea, los más incompetentes, los menos calificados y los más cínicos.
El moderador agregó que el término se utilizó por primera vez en el siglo XVII y tuvo un cierto uso en el siglo XIX, pero es a principios del presente siglo cuando se extendió su utilización en los medios de comunicación.
Respecto a que si el de Andrés Manuel López Obrador encajaba en ese tipo de gobierno. Mi respuesta fue en sentido afirmativo.
¿Por qué? Muy sencillo: su gobierno está lleno de incompetentes, cortesanos y que no conocen la vergüenza.
Y no solamente es kakistócrata. Andrés Manuel López Obrador también encabeza la gerentocracia (forma de gobierno en el que el poder está en manos de ancianos). Por lo tanto, AMLO y la 4T son gerentócratas.
La mayoría de los integrantes del gabinete rebasan las seis décadas de vida.
Manuel Bartlett Díaz (23 de febrero de 1936), director general de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), por ejemplo, cuenta en este momento con 86 años de edad.
El 1 de diciembre de 2018, Olga Sánchez Cordero, primer titular de la Secretaría de Gobernación, contaba con 71 años de edad.
Javier Jiménez Espriú, primer titular de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), contaba con 81 años.
Actualmente, Víctor Villalobos Arámbula y Miguel Torruco Marqués, secretarios de Agricultura y Turismo, respectivamente, cuentan con 71 y 72 años.
Y, aunque no es parte del gabinete, pero sí muy cercano al presidente López Obrador, el Dr. Alejandro Gertz Manero, titular de la Fiscalía General de la República (FGR), cuenta en este momento con 83 años vida.
El problema no es que el presidente encabece un gobierno lleno de adultos mayores. Lo cuestionable del asunto es que el 90 por ciento de su gabinete lo conforman personajes ineptos y peleados con la vida, cuyo único mérito es aplaudirle sus mentiras y ocurrencias.
Ni siquiera la Cámara de Senadores está conformada en su mayoría por ancianos, como sí lo fue en la antigua Roma, ya que la palabra “senado” proviene del latín “senatus” formada de sen[ex] (viejo) y el sufijo -atus (equivalente al sufijo castellano -ado).
Otras palabras que nos llegan de la raíz “senex” incluyen senil, senescencia y posiblemente, sien.
Luego entonces, la 4T de López Obrador es kakistócrata y gerentócrata.
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