Enfoque || Omisión en el pleno al igual en las comisione legislativas

 

Carlos Díaz Figueroa

La negligencia continúa siendo la informalidad en las funciones de los diputados entre la ausencia y el desinterés durante las recientes sesiones en el pleno y en las reuniones de las comisiones legislativas

En seguimiento con la etapa de lecturas de leyes de ingresos y tablas de valores, el recinto se ha convertido en un pleno sin presencia al igual que la reunión informal con el secretario de finanzas del gobieno estatal.

Al medio día del martes se percató el desinterés de los integrantes de la Comisión de Presupuesto y Cuenta pública en una reunión impuntual con el funcionario de gobieno en la sala Ruiz Massieu.

Solo llego a la sede del Poder Legislativo Raymundo Segura Estrada al igual que en la mencionada sala con un largo retraso ante la ausencia de los diputados que integran la comisión legislativa del congreso.

Mientras que en el otro escenario de pleno, los integrantes de la Mesa Directiva son ignorados de frente a unas curules vacías por la falta de responsabilidad en el seno legislativo en la omisión de la mayoría de los diputados.

Lleno el recinto de pleno del congreso local de asesores, secretarios técnicos, seguridad y muy contados diputados en sus respectivos lugares y otros desinteresados en el análisis del mecanismo de las citadas lecturas.

Lo evidente ante el flojo proceso legislativo es la penuria al compromiso y respeto en algunos diputados quienes se ausentan con previa justificación y otros incorporados para llegar posterior (tarde) al desarrollo de la sesión.

Es decir, se aparenta con el curul que se requiere para iniciar y después retirarse y dejar a sus asesores para que les vayan informando sobre el avance de la sesión, lo que llega a incomodar a los pocos diputados presentes.

“Pero esos son nuestros representantes que elegimos”, es lo que en coincidencia se escucha en las galeras y pasillos al interior y exterior del congreso del estado reprobando la vergonsoza actitud de los diputados ausentes.

La supuesta argumentación inmoral en la mayoría de ellos es lo tedioso en una justificación irresponsable convertida entre la soberbia y lo vulnerable por la carencia en el aprendizaje en sus funciones legislativas.

Y claro que es lamentable y vergonsozo los errores de la ciudadania en elegir diputados grises y discapacitados por su ignorancia en el conocimiento y oficio en las tareas en el pleno y comisiones legislativas.

De verguenza es el calificativo rechazable a los legisladores locales que se ocupan en promover solamente politiquería, ausentes en sus cubículos y encerrados en las oficinas de las fracciones parlamentarias.

Lo anterior, no es nada personal, sino la notable evidencia de como los integrantes de la Mesa Directiva están solos, leyendo millares de cuartillas para unos cuantos presentes mientras la mayoría ausentes.