
Detrás de cada persona de cualquier edad que cruza la frontera hay carácter, hambre y sueños, por lo que, deben ser respetados de sus propios derechos, sin que el gobierno de los Estados Unidos subestime a los mexicanos emigrantes.
Así lo consideró, el ex Gobernador de Guerrero, Angel Aguirre Rivero ante el sentido humano y moral quienes por años han permanecido en el país norteamericano en búsqueda de lograr mejores niveles de calidad de vida.
En una trasmisión de cadena nacional, el mandatario retomó el reciente acontecimiento del 3 de julio en Florida, en el que decenas en su mayoría de solicitantes de filo, fueron recluidos en carpas y módulos improvisados.
Ahí en medio de la humillación, los emigrantes no tuvieron acceso al agua potable, atención médica, privacidad legal, entre otras, de primera necesidad, producto de la inconsistencia a la emergencia en demanda y exigencia al respeto propio.
El contexto egoísta y de incertidumbre es la falta de una conciencia política en el gobierno de Estados Unidos con un plan de financiamiento a favor de las necesidades de los migrantes quienes han sobrevivido por décadas en aquella nación.
Por eso, la insistencia de la Presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo en alzar la voz para defender la emigración y la soberanía mexicana, evitando la confrontación estéril con la práctica que viene utilizando el gobierno norteamericano.
En ese sentido, Angel Aguirre apuntó que como ex Gobernador de Guerrero sabe lo que significa la migración, al reiterar que detrás y quienes cruzan la frontera existe la esperanza de millares de mexicanos por tener una vida digna.
A manera que lo anterior se refleja en el miedo y fracaso de Donald Trump, por lo que, el gobierno de la nación está obligado, lejos de pelear, en alzar la voz con dignidad para recordar que los derechos humanos de los mexicanos “no tienen fronteras en muros ni pantanos”, concluyó.