DISRUPTIVA || Guerrero da pasos firmes contra la violencia feminicida

Miguel Ángel Santos // En un país donde los feminicidios siguen representando una de las expresiones más crudas de violencia de género, cualquier avance en su combate merece ser reconocido, analizado y, sobre todo, sostenido en el tiempo.

Guerrero, históricamente golpeado por diversas formas de violencia, hoy presenta avances en la lucha contra la violencia feminicida.

Según el más reciente Informe de Violencia contra las Mujeres del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), con corte al 31 de julio de 2025, ningún municipio de Guerrero aparece entre los 20 que concentran el 25.8% de los feminicidios registrados a nivel nacional.

Es un dato que rompe con estigmas y refleja el impacto de las políticas públicas orientadas a la prevención y atención de estas violencias.

Bajo la conducción de la gobernadora Evelyn Salgado Pineda —la primera mujer en encabezar el gobierno estatal—, Guerrero ha comenzado a transitar por una ruta más clara hacia la erradicación de la violencia contra las mujeres.

Evelyn Salgado ha hecho de esta causa una prioridad de su agenda, apostando por una estrategia integral que incluye atención, prevención y coordinación institucional.

Los datos así lo respaldan. Guerrero ocupa hoy el lugar 14 a nivel nacional en número total de víctimas de feminicidio, con 13 casos en lo que va del año, lo que representa apenas el 3.3% del total nacional.

En la tasa por cada 100 mil mujeres, el estado se sitúa en la quinta posición con 3.74, una cifra que aún preocupa pero que también evidencia un margen de mejora frente a entidades con mayor incidencia.

En otros indicadores de violencia de género, Guerrero se encuentra en el lugar 14 en cuanto a lesiones dolosas, y en el lugar 18 en lesiones culposas, con 212 casos.

Además, destaca que en el rubro de secuestro por cada 100 mil mujeres, no se reportaron casos, una señal positiva en un país donde la desaparición de mujeres es un problema grave y persistente.

Por supuesto, no se trata de cantar victoria. Trece feminicidios siguen siendo trece vidas arrebatadas, trece historias truncadas.

Pero si algo ha quedado claro es que las políticas públicas con enfoque de género, cuando son constantes y sostenidas, pueden hacer la diferencia.

La clave está en mantener la vigilancia ciudadana, fortalecer la participación de las mujeres en todos los niveles de decisión y asegurar que la justicia llegue a cada rincón del estado.

Guerrero avanza. Que este paso firme no sea la excepción, sino el inicio de una nueva historia.