Marcial Campuzano // Las familias del estado de Guerrero y del país, no están preparadas económicamente para que haya nuevos impuestos ni incrementos en los que están vigentes, dijo el coordinador de la fracción parlamentaria del PRI en el Congreso local Héctor Apreza Patrón.
Un aumento a los impuestos significaría un golpe a los bolsillos de las familias, que actualmente viven una economía familiar maltrecha, indicó.
En relación a la advertencia que hizo el secretario de Finanzas del gobierno del estado Raymundo Segura Estrada, en el sentido de que la propuesta de Presupuesto de Egresos que la gobernadora presentó al Congreso del estado podría tener un ajuste a la baja en enero, Héctor Apreza recordó que alrededor del 97.2 por ciento del presupuesto del estado viene del gobierno federal.
“Lo que envió la gobernadora registrará ajustes al alza o a la baja, de conformidad como sea aprobado por el Congreso de la Unión el presupuesto que sea asignado al estado de Guerrero”, explicó.
De ocurrir ajustes al gasto gubernamental del próximo año, la fracción parlamentaria del PRI estará atenta a la redistribución del presupuesto que en su caso haga el Poder Ejecutivo, “pero evidentemente ese será un asunto que sea platicado y consensado con el Poder Ejecutivo”.
Se pronunció porque presupuesto del próximo año garantice no dejar obras inconclusas, así como la rehabilitación de las obras existentes, “porque dejar obras a medio camino sería inadecuado”.
Héctor Apreza informó que están en espera de los informes del proyecto para construir la nueva biblioteca del Congreso del estado, que el ex presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso Alfredo Sánchez Esquivel derribó y dejó en total abandono, y sin presupuesto para que sea construida en este año.
Informó que hasta ahora la Jucopo no ha entregado el dictamen de Protección Civil, para comprobar si se justificó derribar el edificio de la biblioteca del Congreso del estado.